S1: Historia y Enseñanza de Buda

Antes de comenzar con las enseñanzas, generemos una mente de bodhicitta, esto es muy importante.

Historia de Buda Śākyamuni

Antes de adentrarnos en la enseñanza, hablemos brevemente sobre Buda.

Buda Śākyamuni nació en Lumbini. Su padre fue el rey Śuddhodana y su madre, la reina Maya. Buda permaneció dentro del reino como un príncipe. Sin embargo, cuando tenía 29 años, decidió salir fuera del palacio con su amigo. En esta ocasión, presenció algunas cosas diferentes a las que veía en el palacio.

Primero vio a un hombre viejo. Por lo que le preguntó a su amigo quién era esa persona. Su amigo le respondió que esa persona era un hombre mayor. Buda luego le preguntó si él también envejecería como esa persona. Su amigo le respondió que así sería, pero no solo para él, sino para todos seres. Después de presenciar esto y escuchar las palabras de su amigo, Buda se entristeció mucho y decidió regresar al palacio.

Al día siguiente, Buda decidió salir del palacio una vez más. En esta ocasión se encontró con una persona enferma. Buda volvió a preguntarle a su amigo quién era esa persona y si él también tendría que pasar por eso. Su amigo volvió a responder que así sería. Buda, nuevamente muy triste, decidió volver al palacio.

Una vez más, Buda decidió salir del palacio al día siguiente. En esta ocasión se encontró con una persona que estaba siendo llevada por sus familiares y allegados. Buda le preguntó a su amigo qué le estaba sucediendo a esta persona. Su amigo le respondió que esta persona había fallecido y que la estaban llevando al cementerio. Buda volvió a preguntar si eso también le sucedería a él. Su amigo, una vez más, respondió que así sería. Ahora, mas triste que nunca, Buda decidió volver al palacio.

En ese momento, surgió en Buda una gran renuncia a la vida mundana, ya que comprendió que nada era permanente y que estas tres cosas también le ocurrirían.

Debido a esta gran renuncia, Buda tuvo la intención de convertirse en un asceta, pero su padre trató de evitar que esto ocurriera, ya que deseaba que su hijo continuara con el reino y se convirtiera en un exitoso rey.

Aun así, Buda, con 29 años de edad, decidió abandonar el palacio y convertirse en un asceta. En su camino, se encontró algunos maestros no budistas que le enseñaron distintas prácticas de meditación que resultaron ser demasiado intensas para su cuerpo. Buda practicó durante 6 años bajo estas condiciones en Bodhgaya.

Después de este tiempo como asceta, Buda decidió continuar meditando hasta que alcanzó la iluminación y purificó todos los oscurecimientos, y tras lograr la iluminación, se dirigió a Varanasi, donde se encontraban cinco de sus primeros compañeros ascetas. Estos cinco compañeros se convirtieron en sus primeros discípulos después de que Buda alcanzara la iluminación.

Enseñanza de Todos los Budas

En el sūtra de dharmachakra se dice:

Abandona todas las acciones negativas,
Práctica todas las acciones positivas,
Domina por completo tu propia mente,
Esta es la enseñanza de los Budas.

Abandonar las negatividades implica renunciar a todos los tipos de acciones negativas, ya sean pequeñas o grandes. Incluso las acciones más pequeñas pueden resultar en sufrimiento futuro. Por esta razón, debemos abandonar todas las acciones negativas.

Practicar todas las acciones positivas significa llevar a cabo acciones positivas, sin importar si son pequeñas o grandes. Debemos tomar como práctica realizar acciones positivas. Toda la felicidad proviene del karma positivo. El karma positivo conduce a resultados positivos.

Tercero, domina por completo tu propia mente. Todas las negatividades provienen de una mente que no ha sido dominada. El control sobre la mente es la fuente última de la felicidad. Por esta razón, debemos dominar por completo nuestras propias mentes.

Todas las enseñanzas de Buda están resumidas en estas 3 líneas, por eso se dice que “Esta es la enseñanza de los Budas”.

Estas fueron las enseñanzas de Buda a los cinco discípulos. Ahora vamos a hablar de las cuatro verdades de los nobles.

Cuatro Verdades de los Nobles

Ahora vamos a hablar de las cuatro verdades de los Nobles. Estas cuatro son:

  1. La verdad del sufrimiento.
  2. La verdad del origen.
  3. La verdad de la cesación.
  4. La verdad del camino.

¿Por qué hablamos de cuatro verdades? Hablamos de cuatro porque estas pueden considerarse como causas y frutos.

La verdad del sufrimiento (1) y la verdad de la cesación (3) son resultados, mientras que la verdad del origen (2) y la verdad del camino (4) son causas. Por lo tanto, pueden dividirse en causas y frutos.

Primera Verdad

La primera verdad, la causa del sufrimiento, se refiere a que dentro del saṃsāra existen 3 tipos de sufrimiento.

  1. El sufrimiento del sufrimiento
  2. El sufrimiento del cambio
  3. El sufrimiento omnipresente

En esta verdad debemos reconocer estos tipos de sufrimiento dentro del saṃsāra. Reconocer estos sufrimientos es similar a un paciente que se da cuenta de que está enfermo.

Sufrimiento del Sufrimiento

El sufrimiento del sufrimiento se divide en cuatro tipos principales de sufrimiento.

  1. El sufrimiento del nacimiento
  2. El sufrimiento de la vejez
  3. El sufrimiento de la enfermedad
  4. El sufrimiento de la muerte

Sufrimiento del Cambio

Esto se refiere a que todas las cosas que nos brindan felicidad son sufrimiento, esto se refiere a que nos traerán sufrimiento en el futuro. A modo de ejemplo, cuando adquirimos un buen carro, inicialmente nos sentimos felices, pero después de 1 o 2 días, con el paso del tiempo, empezamos a sentirnos frustrados debido a las implicaciones de poseer este carro.

Sufrimiento del Omnipresente

Este sufrimiento omnipresente es demasiado sutil, y normalmente no somos capaces de percatarnos de él. Este sufrimiento es la causa de los otros dos tipos de sufrimiento. Este sufrimiento surge debido a este cuerpo físico. Este cuerpo surge debido al nacimiento, y nacemos debido al karma negativo, y este karma negativo nace debido a las aflicciones mentales. Este cuerpo es la causa del sufrimiento. Si nacemos en el saṃsāra, definitivamente tenemos que experimentar estos tipos de sufrimiento.

Podemos preguntarnos, ¿por qué debemos darnos cuenta de estos tipos de sufrimiento? Darse cuenta de esto tiene un gran significado, no es algo inútil o inservible. Algunas personas dicen: “Ya estás sufriendo, ¿por qué sigues hablando aún más sobre el sufrimiento?”

Darse cuenta de esto tiene un gran beneficio. Es como un paciente que se da cuenta de que está enfermo, lo que lo lleva a un diagnóstico y luego a tomar la medicina que le permitirá recuperar su salud.

Darnos cuenta de estos sufrimientos es lo mismo, nos conducirá a poder liberarnos de estos. La causa para liberarnos del sufrimiento es comprenderlo.

Pregunta:
Cuando se dice que el cuerpo es la causa del sufrimiento, siento una especie de aversión. Siento que me está diciendo que este cuerpo que aprecio tanto es en realidad mi enemigo. ¿Y qué sucede entonces con los Budas? ¿Los Budas carecen de un cuerpo?

Respuesta:
El cuerpo físico es la causa del nacimiento. Si no nacemos, no experimentaríamos los sufrimientos de la vejez, la enfermedad y la muerte. Pero debido a que nacemos, tenemos que experimentar estos sufrimientos.

Los Budas no tienen un cuerpo físico burdo. Tienen un cuerpo de sabiduría. Este cuerpo es la Budeidad. También se le llama cuerpo del dharma. Por esta razón decimos que los Budas están completamente libres del sufrimiento. Incluso durante los diez niveles de realización, el cuerpo es muy diferente a nuestro cuerpo físico actual.

Segunda Verdad

No hay forma en que algo pueda surgir sin causas y condiciones. Por lo tanto, después de conocer el sufrimiento, debemos conocer las causas del sufrimiento.

Comprender las causas del sufrimiento es la segunda verdad. La verdad de la causa.

¿Por qué sufrimos? Sufrimos por una causa. ¿Y cuál es esta causa? Es el karma negativo que acumulamos en vidas pasadas y en esta vida. Y también por las aflicciones mentales. Estas emociones son numerosas. Podemos mencionar el deseo y la ira, las cuales surgen debido a la confusión, o no reconocer la realidad. Esta confusión es la raíz del sufrimiento. La confusión da origen a más emociones, como el ego, la arrogancia, una mente competitiva. Todas estas aflicciones mentales luego nos llevan a acumular karma negativo.

Tercera Verdad

Ahora, debemos saber que existe una salida para este sufrimiento. Si no hubiera una salida, contemplar sobre estos sufrimientos sería completamente inútil y nos causaría un gran estrés. Por esta razón, también debemos considerar que hay una salida para este sufrimiento.

Esta es la tercera verdad, la verdad de la cesación.

Cuando comprendemos esta verdad de la cesación, nos liberamos por completo del sufrimiento. Por ejemplo, en este momento nos encontramos en este estado del precioso cuerpo humano, por lo que estamos libres de los sufrimientos de los tres reinos inferiores. Sin embargo, aún no estamos completamente libres del sufrimiento. Para lograrlo, debemos alcanzar el estado de la Budeidad, el cual es el estado libre del sufrimiento.

Cuarta Verdad

Es importante que nos demos cuenta de que es posible estar libres del sufrimiento.

Entender cómo alcanzar este estado libre del sufrimiento es crucial. La causa de la cesación del sufrimiento es el camino, y este camino es la práctica del dharma. Esta es la cuarta verdad del camino.

En el nivel en el que nos encontramos, debemos comenzar por abandonar las acciones negativas. Estas se dividen en tres acciones del cuerpo, cuatro de la palabra y tres de la mente. Y debemos adoptar las diez virtudes, tres relacionadas con el cuerpo, cuatro con la palabra y tres con la mente.

Las tres acciones negativas del cuerpo son:

  1. Causar la muerte
  2. Robar
  3. Conducta sexual incorrecta

Estas tres acciones negativas provienen del cuerpo físico y deben ser evitadas.

Las cuatro acciones negativas de la palabra son:

  1. Mentir
  2. Charla ociosa
  3. Dividir a las personas a través de las palabras
  4. Habla ofensiva

Las tres acciones negativas de la mente son:

  1. Tener intenciones de hacer daño a los demás
  2. Envidiar y desear la fortuna de los demás
  3. Mantener puntos de vista erróneos

Después de abandonar las diez acciones negativas, debemos practicar las acciones opuestas a ellas, que son las diez acciones positivas:

Por ejemplo, en lugar de quitar vidas, debemos preservarlas. En lugar de robar, debemos ser generosos. En lugar de tener una conducta sexual incorrecta, debemos llevar una vida disciplinada.

En lugar de mentir, debemos decir la verdad. En lugar de charla ociosa, debemos recitar mantras u oraciones. En lugar de dividir a los demás, debemos conciliarlos; en lugar de usar un lenguaje duro, debemos ser respetuosos.

En lugar de desear el mal a los demás, debemos ser amables y tener buenas intenciones. En lugar de desear la fortuna de los demás, debemos tener una mente generosa. En lugar de mantener puntos de vista erróneos, debemos tener puntos de vista correctos.

Si abandonamos estas diez acciones negativas y practicamos estas diez acciones positivas, no renaceremos en los reinos inferiores y tendremos un buen nacimiento en las próximas vidas.

Si no practicamos, incluso los Budas no podrán salvarnos. Los Budas dicen que somos nuestros propios maestros. Si deseamos experimentar la felicidad, debemos practicar las acciones positivas. Si deseamos evitar el sufrimiento, debemos abandonar las acciones negativas.

Pregunta:
¿Qué relación tiene todo esto con la enseñanza de que todo es como un sueño?

Respuesta:
Esta enseñanza es de un nivel avanzado. Para hablar de que todo es como un sueño, primero debemos hablar sobre la vacuidad. Por lo que esta enseñanza es de un nivel más elevado.